Emotivo
festejo para celebrar
a Nuestra Señora de la Merced
Konaté
Hernández
CANCÚN.—
Con gran alegría y efervescencia la comunidad católica de la parroquia de
Nuestra Señora de la Merced, que se ubica en la Región 103 sobre la avenida
Miguel Hidalgo (Ruta 5), festejaron a su Santa Patrona, la cual inició con una
procesión con autos alegóricos en el parque Iris Mora, que se encuentra entre
las avenidas Leona Vicario y Puerto Juárez (Talleres), motivo por el cual los
gremios y movimientos eclesiales empezaron a reunirse en punto de las 6 de la
tarde para realizar un corto pero significativo recorrido, por las calles
aledañas, mientras se rezaba el Santo Rosario con fervor y acompañado de
hermosos cánticos.
Al
llegar a la iglesia el párroco Ignacio Álvarez Álvarez, sacerdote mercedario
acompañado del padre Fernando Rodríguez, L. C. impartió la bendición a la
multitud, para luego dar inicio a la Santa Misa, además de bendecir después de
la homilía a cuatro damas y un caballero que se consagraron a la Tercera Orden
Mercedaria, recibiendo sus respectivos escapularios y distintivos de la misma.
Esta
advocación mariana nació en España, desde donde se difundió su devoción al
resto del mundo; la Santísima Virgen se le apareció a San Pedro Nolasco en
1218, dándole la recomendación de fundar una comunidad religiosa que se
dedicara a auxiliar a los cautivos que eran llevados a lugares lejanos, por lo
que bajo esta inspiración fundó la orden dedicada a la merced, cuyo significado
es obras de misericordia, mientras que su misión es la misericordia para con
los cristianos cautivos en manos de los musulmanes, asimismo muchos de los
miembros de la orden canjeaban sus vidas por la de presos y esclavos. Fue
apoyado por el rey Jaime el Conquistador y aconsejado por San Raimundo de
Peñafort. Tras la muerte del fundador en 1272, los frailes tomaron oficialmente
el nombre de la Orden de Santa María de la Merced, de la redención de los cautivos,
aunque en la actualidad son ampliamente conocidos como mercedarios, tienen a
María como fundamento y cabeza de su orden.
Al
término de la Celebración Eucarística, se cantó “Las Mañanitas” a Nuestra
Señora de la Merced en su día, con la elaboración de un delicioso pastel con su
imagen, y finalmente todos los gremios, apostolados y los asistentes, pasaron
al atrio de la parroquia para disfrutar de la tradicional vaquería, jarana y
antojitos mexicanos y de la región.
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