martes, 15 de mayo de 2018


Insensibilidad de candidatos hacia los electores

Konaté Hernández

De cara a los comicios que se llevarán a cabo el próximo 1 de julio, las tres grandes alianzas: “Todos por México” conformado por los partidos Revolucionario Institucional (PRI), Verde Ecologista de México (PVEM, Nueva Alianza (Panal); “Por México al Frente” por los partidos Acción Nacional (PAN), de la Revolución Democrática (PRD), Movimiento Ciudadano (MC) y “Juntos Haremos Historia” por los partidos Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), del Trabajo (PT) y Encuentro Social (PES) que encabezan José Antonio Meade Kuribreña, Ricardo Anaya Cortés y Andrés Manuel López Obrador, respectivamente, además de los independientes ex militantes en algún tiempo de partidos políticos nacionales como Jaime Rodríguez Calderón y Margarita Ester Zavala Gómez del Campo, de estos distinguidos presidenciales no hay uno solo que haya logrado convencer con propuestas a un electorado que lejos de investigar y analizar los perfiles de quien habrá de llevar las riendas del país ya de por si maltrecho por la gran descomposición política, económica y cultural que prevalece y que han sumido a la población en la más extrema pobreza e ignorancia de la cual se aprovechan.

Los partidos aliancistas hasta el momento no han logrado permear en la sociedad, mucho menos posicionar a sus desacreditados candidatos en las preferencias del electorado, en tanto que los independientes siguen enfrascados en una contienda que quizá los lleve a cavar su sepultura política en lo que será la crónica de una derrota anunciada, mientras que en referencia a los equipos de campañas tanto de unos como de otros se han enfrascado en una guerra sin cuartel por demás sucia al utilizar descalificativos en todas las tonalidades de colores con la intención de ofender al contrario o simplemente a quienes piensan u opinan diferente.
En virtud de lo anterior quienes acudan a emitir el sufragio durante los comicios del 1 de julio lo harán enardecidos más por el furor de lo mal que ha actuado la clase política gobernante que no supo conducir al país hacia una prosperidad para todos los ciudadanos, en especial para las clases marginadas, que sin lugar a dudas son las mayorías, motivo por el cual el voto que emitirán dista mucho de haber sido analizado previamente con razonamiento basado en los perfiles de los presidenciales y de sus plataformas políticas, es decir que el ciudadano no votará en conciencia por un mejor país sino que lo hará con el hígado y el apasionamiento enérgico que ha sembrado en ellos el aspirante de la alianza Juntos haremos historia.
Y finalmente con toda seguridad todo es debido a la falta de sensibilidad tanto de los candidatos como de quienes integran los equipos de campaña que no han querido palpar las principales carencias y necesidades que padece la gran mayoría de la población al no querer asumir un compromiso real con la sociedad, lo que los ha llevado a padecer de una ceguera y sordera crónicas que los lleva no saber escuchar ni observar el entorno que les rodea.

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