domingo, 16 de agosto de 2015

Falsa democracia en el PAN;
Eduardo Martínez inhibe el voto


Konaté Hernández

Como un verdadero camaleón considera la militancia panista a su dirigente estatal Eduardo Martínez Arcila, por aparentar una falsa democracia, pues consideran que el Partido Acción Nacional transita de lo ético a lo patético, al pretender tener el control de los hilos de acuerdo a sus propios intereses, además de notarse su desesperación al inhibir con su sola presencia a la militancia para evitar que fluyera con rapidez en el cumplimiento de sus derecho a decidir con plena libertad, sin ser coaccionada.
Y es que la participación de la militancia en la elección del presidente nacional del partido fue en Benito Juárez de sólo el 44.61 por ciento de un total de 901 panistas con derecho a emitir su voto, es decir, sólo votaron 402.

Esto refleja la falta de interés de la mayoría de acudir a las instalaciones del Comité Directivo Municipal (CDM) del PAN en este municipio, ubicado en sobre la avenida Francisco I. Madero (Ruta 4), en la región 93, manzana 55, lote 32. Tan solo dos horas antes del cierre, a las 3 de la tarde, sólo se habían contabilizado 148 votos en la mesa 1 y 147 votos en la mesa 2.
Al cierre de las mesas de votación, a las 5 de la tarde, Javier Corral obtuvo 82 sufragios y Ricardo Anaya 127; mientras que en la mesa 2 Javier Corral obtuvo 84 y Ricardo Anaya 109, dando como resultado en Cancún el triunfo de Ricardo Anaya con 236 votos en total, mientras que Javier Corral 166.

En todo el estado los resultados fueron de la siguiente manera: 1025 votos para Ricardo Anaya y 444 para Javier Corral.
Eduardo Martínez Arcila emitiendo su voto.
La participación fue tan sólo de un 44.61 por ciento de un “padrón inflado” de 901 militantes activos, pues algunas voces inconformes consideran 520 como miembros efectivos, que son quienes por lo general más participan en actividades del partido. Señalaron al respecto como referencia que en la última contienda interna a nivel estatal, sólo participó el 30 por ciento de militantes, es decir 128 de los 520 que consideran efectivos, mientras que el 70 por ciento restante son miembros manipulados por los principales grupos que se disputan el control total y absoluto de la institución.
Entre estos grupos que se disputan el control del partido está el que encabeza la aún legisladora federal Alicia Concepción Ricalde Magaña, con sus secuaces más cercanos Rogelio Márquez Valdivia y Sergio Bolio Rosado, quienes apoyan al grupo denominado por Javier Corral como la “rebelión de las bases”, mientras que por el otro lado se encuentran el grupo liderado por Patricia Sánchez Carrillo y su “achichincle” Eduardo Martínez Arcila, quienes apoyan a Ricardo Anaya, sin embargo lo único que ambos grupos hacen es aparentar un divorcio, pero como ya es costumbre en el PAN, esta estrategia es parte de las mal llamadas concertaciones que tanto popularizara el ex presidente de México Felipe Calderón Hinojosa
Aunado a lo anterior y de acuerdo a las cifras que se han manejando, la militancia ya está harta y cansada y ven como única vía de manifestarse la no participación, o por así decirlo, una participación nula para la selección de su dirigente nacional, pues si bien es cierto la gran mayoría de los panistas, al menos en este municipio de Benito Juárez, ni siquiera conocen personalmente a sus dirigentes, menos aún tienen conocimiento de su plataforma política o plan de trabajo. Por ello las oficinas del Comité Municipal blanquiazul lucieron prácticamente vacías durante toda la jornada electoral, la cual empezó a las 10 de la mañana y cerró a las 5 de la tarde.

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