martes, 24 de febrero de 2015

Vecinos de la 2-A, inconformes
por obras en el centro de Cancún


Vecinos de la Supermanzana 2-A están indignados por todos los problemas que ha generado la remodelación del centro de Cancún, que se ha eternizado y no tiene para cuando concluir, principalmente porque desde que iniciaron las obras, en diciembre de 2013, las rutas de transporte que transitaban sobre la avenida Tulum fueron desviadas hacia la avenida Uxmal, en el tramo vial comprendido entre las avenidas Bonampak y Tulum, generando con ello caos vial y contaminación ambiental y auditiva.
Pero el descontento y rechazo se acentúa por la indiferencia de las autoridades municipales, quienes ante la protesta de vecinos han condenado a la zona a seguir soportando el 20 por ciento de esta carga vehicular una vez que concluyan las obras.
Ante ello Wilfrid Hoffmann Monteux, residente de la Supermanzana 2-A, hizo un llamado a los vecinos a través de redes sociales como Facebook a unirse para hacer valer sus derechos y frenar lo que definió como “abominación vial” y para que vuelva a ser la zona residencial que era antes.

El afectado enumeró lo que señaló como “tres buenas razones para no permitir que pase un solo vehículo pesado del transporte público en esta sección de la avenida Uxmal”:
1. La SM2-A, es un área donde todos los residentes y propietarios hemos pagado los predios en función de su ubicación; misma que solía ser una zona residencial antes que fuesen tomadas dichas medidas. De igual manera, pagamos un impuesto predial acorde a la zona en donde vivimos, no para que la asalten con un intolerable bombardeo continuo de autobuses hediondos y estruendosos, ocasionando que tengamos que permanecer enclaustrados con las ventanas cerradas en nuestros propios domicilios, comercios, hoteles y restaurantes. ¿Donde está la aplicación de la reglamentación que debería de protegernos contra semejante atropello?
2. Este tramo de la avenida Uxmal jamás fue concebido para soportar tal flujo de vehículos pesados ya que no tiene la estructura, ni la capacidad vial para ello. Además, el revestimiento de cemento hidráulico, a diferencia del asfáltico, no absorbe las vibraciones, ni el ruido, sino todo lo contrario. Esta serie de factores incrementan aún más el impacto ambiental y acústico inaguantable, causando un grave perjuicio a la comunidad de los residentes que vivimos en esta área.
3. Esta mala repartición de las rutas camioneras repercute también en una grave afectación al valor de nuestros predios que bordan dicha avenida, así como la gran dificultad que esto genera para rentarlos o venderlos.
Por último afirmó que “a la fecha no hemos constatado ningún cambio y le exigimos una vez más a la autoridad que tome cartas en el asunto. Estaremos atentos al desarrollo de esta deplorable situación sin quitar el dedo del renglón y hasta que se nos haga justicia”.

Por todo ello pidió a los vecinos afectados a escribir al siguiente correo electrónico: wchido65@hotmail.com, para recabar las inconformidades y canalizarlas de manera colectiva ante la autoridad competente a manera de petición pública. Agregó que se mantendrá informado a los interesados sobre el caso y de las medidas eventuales que podrían tomar en conjunto en caso de que ser necesario.

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