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Julián Ricalde se pasea

como si nada en Isla Mujeres

Julián Ricalde Magaña.

Marcos Chi Cahun

Tal como sucede cuando los pequeñuelos hacen alguna travesura y se van a refugiar detrás de las faldas de la mamá, con el fin de que los proteja, así pasa con los políticos que actúan de mala fe durante el desempeño de las labores que el pueblo les confirió, quienes después de dejar un caos en la administración pública municipal, estatal o federal, estos pésimos funcionarios con el afán de evadir a la justicia, van a refugiarse tras las faldas de mamá dejando claro que aún no han sido destetados, ya que al dejarlos solos por un momento, provocaron confusión en el desarrollo de sus funciones.

Y es que el miedo no anda en burro, pues tal parece que el ex presidente municipal del Ayuntamiento de Benito Juárez, personaje que después de su polémico gobierno desapareció de la esfera política argumentado que se encontraba en uno de sus ranchos, de las muchas propiedades que adquirió, sin embargo lo cierto es que Julián Javier Ricalde Magaña es fácilmente localizable, ya que como niño caprichoso, consentido y mimado por sus progenitores, se encuentra en casa de sus padres, luciendo su nuevo look, al haberse dejado crecer las barbas quizá para tratar de encubrirse, sin embargo no pasa desapercibido en Isla Mujeres, donde todo mundo lo conoce.

José de la Peña Ruiz de Chávez.

A Julián Ricalde se le puede ver caminando feliz y campante de la mano de su mamá todos los fines de semana en su natal ínsula. Sin embargo ya siente pasos en la azotea con eso de que el actual secretario del Ayuntamiento, José de la Peña Ruiz de Chávez, declaró en días pasados que siempre sí habrá cacería de brujas, ya que todos los funcionarios que trabajaron en dicha administración municipal serán llamados a comparecer ante las autoridades competentes, sobre todo por un faltante de poco mas de 2 mil millones de pesos de las arcas municipales.

Al decir que todos los que trabajaron en el gobierno anterior serán llamados a comparecer, es de entenderse que tanto perredistas como panistas tendrán que rendir cuentas, tras haberse prestado a trabajar en dicha administración, y es que ni siquiera los miembros blanquiazules están libres de culpa alguna, todo lo contrario, son los principales responsables de la corrupción que se vivió durante el Ayuntamiento encabezado por Julián Ricalde, debido a que es imposible callar lo que es evidente y los panistas, con tal de conservar el hueso, fueron cómplices de un sinnúmero de fraudes, corrupción como en los viejos tiempos de los gangsters.

Y es que no hay un solo panista, tanto los que ocuparon cargos directivos como los que no los ocuparon, que no haya sido cómplice de los acontecimientos que sucedían a diario en la administración de Julián Ricalde, ya no digamos los ex regidores Marcelo Rueda Martínez, Julián Aguilar Estrada o la ex síndica Guadalupe Leal Uc, quienes lejos de representar los intereses de la Comuna, se dedicaron a representar sus propios intereses personales, así como los de la familia Ricalde Magaña.

Rafael del Pozo Dergal.

Tenemos el caso de Rafael del Pozo Dergal, que lejos de heredar las cualidades de su padre, dista mucho de ello, dado que el tiempo que estuvo en la oficina de transparencia con Gregorio Sánchez Martínez, en lugar de cumplir con sus funciones sólo se dedicó a ocultar información y por ello Ricalde Magaña lo contrató, primero para hacerse cargo del área jurídica, pero por su mal desempeño fue removido a la Secretaría General, después que corrieron a Eduardo Galaviz Ibarra.

Aun hay mucho que decir de otros panistas que deberán de ser llamados a rendir cuentas a las autoridades competentes por su mal desempeño en la administración pasada, pero eso ya se irá desglosando con el correr del tiempo.